Con un registro de expresiones sin igual, Noa me contagió su alegría, y no tuve más remedio que sacarla como era, simpática como ella sola. La sesión terminó con unas tomas acompañada de sus papás que se portaron de maravilla, y que acabé procesando en blanco y negro, por lo que representan en su sentido más nostálgico, por el íntimo y mágico momento que representan.







Comentarios
0 comentarios:
Publicar un comentario